Cuando Dionisos emborrachó a Jesús

Señala Eugenio Trías[1] que el dolor, el sufrimiento, la miseria, en definitiva cualquier situación nefasta propia, se contrapesa mediante la proyección en la imagen de otro. Tal vez en ningún sitio del XVIII español como en Sevilla podrían haberse dado estas necesidades de imágenes exageradas y dolientes cuya contracarga de sufrimiento supongan un refugio placentero [...]