República, ni blanca, ni negra.

Ni joven, ni anciana.

Tampoco de derechas o de izquierdas.

Roja, como los más increíbles anocheceres,

Amarilla, como el trigo bronceado por el sol,

Morada, como las violetas en primavera.

 

República, que te fuiste,

Pero que volverás,

Al canto de “no hay dos sin tres”,

Gritado por las cientos de personas que te invocan,

Por las calles del país que te vio nacer y desaparecer.

Por las calles del país que te necesita, y te ansía.

 

República, única opción democrática,

Igualitaria y libertaria.

Te tratan como un fracaso, sin ser conscientes de

Que el fracaso es el actual sistema,

De que el fracaso es la Monarquía que nos imponen.

Esa Monarquía asesina, injusta, de la cual somos súbditos.

 

Plebeyos, súbditos y corderos somos,

Y aún se preguntan porque este fervor hacia el Tricolor.

¿Por qué su sorpresa ante nuestra petición?

Será que creían que lo estaban haciendo bien,

Y que bastaba con que Felipe se casase con una de nosotras,

Para que pensemos que la familia real es muy campechana ella.

Pero no pararemos de luchar,

Pues si no es ahora, luego será.

Porque la Monarquía moribunda está.

Rojo, amarillo y violeta.

Nuestro Tricolor, nuestra lucha.

Amalia Cocco

DSC00408

 

Foto: Amalia Cocco