El cine ha sido, y sigue siendo, utilizado por muchos para describir duras realidades, situaciones que en ocasiones se escapan a nuestro conocimiento y que los medios de comunicación, muchas veces, se encargan de ocultar. Son muchos los directores de cine que muestran en sus películas estos mundos, transmitiendo un carácter de crítica social en ellas. Entre ellos podemos encontrar a Oliver Stone, Michael Winterbottom, Kirby Dick, Michael Moore y el gran Ken Loach, entre otros. Es sobre este último de quien os hablaré en esta ocasión.
Ken Loach es un famoso director de cine, procedente de Reino Unido y que transmite a través de sus películas un realismo social que es fácil de notar y que enseguida te atrapará, metiéndote en la piel de los protagonistas.
En 1964, y bajo el manto de la BBC, empieza su carrera con una serie de documentales, siendo uno de los más conocidos y debatidos Cathy Come Home, cuya trama trata el problema de la vivienda y la crisis y la pobreza que hay dentro de lo que se ha ido llamando “el estado del bienestar británico” (cambiar británico por español y ya tenemos un tema actual, ¿eh?). A partir de aquí se va formando el estilo tan característico de Loach: crítica las injusticias sociales y defiende al oprimido. Aunque su fama y su éxito se consolida a partir de los años noventa debido en gran parte a los cambios políticos que el país sufre: Good bye, Margaret Tatcher.
Aunque toda su filmografía tenga el mismo aire de crítica social, las temáticas son de lo más variadas, tratando en El viento que agita la cebada la guerra por la independencia de Irlanda; Tierra y Libertad cuenta el frente que se le hizo a los fascistas durante la Guerra Civil española en Aragón. Una película que muchos dicen que ha sido inspirada en el libro de George Orwell “Homenaje a Cataluña” y que cuenta la experiencia del autor en la Guerra Civil española, en la cual participó como soldado y oficial en el POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista). Podemos observar la lucha sindical de unos inmigrantes en Pan y Rosas, y las dificultades de tener una relación con una persona que no pertenece a tu cultura en Solo un beso. En su filmografía encontrarás muchísimas más temáticas aunque si te has visto muchas de sus películas habrás notado que muchos de sus films tienen temáticas parecidas, tratando las situaciones de la clase obrera con un aire realista, intimo y de lento avance que dependiendo de los gustos de cada uno, se hará más o menos pesado. Esto lo podemos ver en películas como La cuadrilla o en su último estreno, La parte de los ángeles.
Este director es un indispensable si te gusta el cine de crítica, más realista y que no contenga tantos efectos especiales que es imposible no dudar de la veracidad de lo que te están contando. Un tipo de cine intimista que sabe llegar a las personas y que con la fotografía y los planos utilizados te da la impresión de estar dentro de la película y que eres aquel vecino, comerciante, ciudadano que se cruza con los protagonistas y forma parte de su mundo, de su historia. Pero además, Ken Loach consigue que nos metamos en la piel de aquellas personas que se ven constantemente discriminadas por su condición social, su procedencia, sus aptitudes y su cultura y que en más de una ocasión nos reconozcamos a nosotros mismos o a algún conocido en la piel de sus protagonistas.
Amalia Cocco (@coccohirondelle)
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