Con una década y cuatro años atrás Nocturama sigue encandilando la noche de Sevilla y sigue siendo el refugio de despistados o de entendidos, al fin y al cabo, gente que sale ilusionada del cartel y del lugar también. Por tercer año consecutivo esto sigue vigente y la idea de alejar el ciclo lejos del CAAC se confirma como un gran acierto. El nuevo emplazamiento, el jardín del Casino de la Exposición, hace que se vuelva a repetir aquello de que aunque no te haya interesado nunca la música, es un sitio y un momento ideal para estar y vivirlo. Llegados al ecuador del ciclo Nocturama, ya podemos hablar de éxito. El cartel, con y sin riesgos, sigue siendo de lo más diverso y atractivo del Rock, del Pop y el Indie (sea lo que sea la etiqueta esta) nacional e internacional.

La primera noche la abrió Marina Gallardo presentando The Sun Rises in the Sky and I Wake Up, su último trabajo hasta el momento, menos oscuro que su anterior y atractivo This is the Sound. Marina se mostró ante los presentes junto a una banda que se entendía a la perfección, mención especial a las baterías de Pepe Benitez y Mariano Torres. El repertorio, magnético y eléctrico la llevan más allá de lo que llaman Dream Pop. Su voz áspera y suave a la par, a la guitarra y al teclado, dio buena cuenta sobre todo de sus dos últimos discos. Su música cobra más vigor en directo, pero no pierde ni magia negra ni delicadeza. Puede que “White Glare” sintetice adecuadamente el sonido de Marina Gallardo. Estamos seguros que, sin desvalorizar el presente, está a punto de sorprendernos a lo grande, más aún. Más de uno se conformaría con la mitad del talento y el savoir faire de esta joven andaluza. En el segundo round de la noche fue la  música millenial de Bronquio, es decir Santiago Gonzalo y sus aparatos electrónicos. Bronquio llega desde Happy Place, el extraordinario sello sevillano que lo mismo tiene a Andrés Herrera “Pájaro” que a este nuevo valor de la música de hoy en día. Gamberrismo del bueno, Rap, Trap y Techno se dan la mano a los mandos de Bronquio. Lo más granado del exquisito panorama actual sevillano se ha puesto en sus manos para encargarle remixes… De hecho, en Bronquio colabora en el próximo álbum de Kiko Veneno, que acudió al evento. No pudo faltar su single más famoso hasta el momento, “Galgo”, con Pablo Peña de Fiera, de Pony Bravo acompañándole en el escenario. Una de las bandas sevillanas que se han visto remezcladas por Bronquio han sido los enormísimos Quentin Gas & Los Zíngaros. De su brillante Caravana, Santiago ha dado una buena dosis electrónica a “Mala Puñalá, con la que se cerró la muy gaditana presentación de Nocturama 2018.

Para el segundo día, jueves, un espectáculo bien distinto. Los cada vez más famosos Instituto Mexicano del Sonido. Llevan en activo desde 2012 y gozan de popularidad. Su líder es Camilo Lara, y es el frontman perfecto para este género, que consiste en fusión para bailar, sin experimentos raros de por medio. Mister Lara se subió al escenario para animar a un público tímido al principio y loco al final. “Mi T-Shirt de la NASA” fue un adelanto del ambiente festivo que se creó en el jardín del Casino de la Exposición. Letras comprometidas como las de “México” contrastan con el ingenio y el humor y/o la llamada abierta por el baile de “Moviendo la Cadera” o “Yo Digo Baila”. Toda una sorpresa a traición para los que son los más quietos de la pista.

El viernes, más ritmo aún, más eléctrico. Desde el País Vasco, los jovencísimos Belako realizaron una actuación que se hizo más grande a medida que avanzaba. No es de extrañar que a estos cuatro músicos Post-punk se los estén rifando entre festivales y discográficas. Con tan sólo siete años en la música están armados con un buen arsenal de inteligencia y habilidad y un abanico bien suculento de influencias como Sonic Youth, Joy Division o Nirvana. Josu Ximun añade voces a las de ls vocalista Cris Lizarraga. Él es el guitarrista y responsable de mucho del sonido de Belako. Su trabajo consiste en no repetirse en cada canción. Ahí es nada. Siempre en movimiento, al día siguiente se dirigían al Primavera Sound de Portugal. Luego la locura se apoderó del segundo escenario de Nocturama con El Lobo en tu Puerta. Hasta el momento, y con permiso de los IMS, ha sido la actuación más movida (y [pacíficamente] destructiva) de esta primera mitad del ciclo. Imagina que coges a Rage against the Machine y le das una dosis de Blues. Pues así son. Riffs hirvientes, voces desgarradas y una batería atronadora con un repertorio lleno de canciones diferentes unas de otras, que es el mayor mal que grupos de este sonido tienen. El Lobo en la Puerta se salva con gran destreza de este percance del género y de otros, como aquella noche, cuando se rompió el pedal del bombo, y es que su directo es salvaje además de perfectamente ejecutado. Aún promocionando Bestias del Sur Salvaje (2017), que es lo que son estos tres músicos, nos dejaron boquiabiertos a todos los nocturamers. Está claro que el Nocturama #lasangrealtera.

Esta semana no se presenta menos atractiva: El miércoles 13, Peter Hook, en una única cita en España, estará presentando los clásicos de las bandas donde tocó el bajo, es decir,  Joy Division y New Order, acompañado del conjunto The Light. A la noche siguiente, Riverboy, más que recomendable, repasará lo mejor de su breve aún y espectacular repertorio de Psicodelia y Country. Luego le seguirá Christina Rosenvinge, la llamada musa del Indie, presenta nuevo álbum y nos deleitará también con sus temas que ya conocemos. Allí estaremos.

Antonio J. Reyes (@AntonioJesusRe)